La Defensoría dijo que la gente usa tarjetas para poder comprar comida y medicamentos
Desde la Defensoría del Pueblo advirtieron que “el endeudamiento con tarjetas de créditos se ha convertido en los últimos meses en un grave problema que afecta la economía de muchas familias, sobre todo en razón de que las tasas de intereses se han disparado desmedidamente y esta situación se produce en momentos en que, la mayoría opta por realizar pagos mínimos de los resúmenes debido a la pérdida del poder adquisitivo y la mora puede generar intereses de más del 120%”.
El Ombudsman Provincial, José Leonardo Gialluca señaló que “el pagar únicamente el monto mínimo es toda una tentación, pero se inicia un grave círculo vicioso donde se generan intereses y se le aplican a las personas la tasa de crédito personal más el 50% y hay que recordar que el Banco Central decidió aumentar la misma al 60%. Por otro lado también advertimos desde el Organismo de la Constitución que los consumidores pasaron a usar la tarjeta de crédito para poder adquirir comida y medicamentos”.
En este contexto señalo que “nos encontramos con que el panorama actual muestra un crecimiento de las carteras en mora y de la incobrabilidad, producto de una abrupta caída del poder adquisitivo del ingreso familiar por salarios que se ajustaron con pautas de entre 15% y 18% durante el primer semestre, mucho antes de las devaluaciones de mayo/junio y subsiguientes, y de la aceleración del proceso inflacionario de los últimos meses. Por otra parte se nota además perfectamente como los tipos de consumos con tarjeta de crédito ya no están ligados a bienes superfluos o suntuarios, sino que se relacionan directamente con productos de primera necesidad como son los alimentos y elementos de farmacia”.
Advirtió que “la situación se vuelve crítica porque estamos atendiendo a consumidores que ya no deben porque quieren, sino que no puede afrontar los gastos de subsistencia con los ingresos que tiene y por ello se endeuda con las tarjetas de créditos y esto continuará así, hasta que no exista una verdadera recomposición salarial y se logre disminuir o controlar la fuerte inflación existente”. Frente a ello se atienden a sectores que pertenecen en su mayoría a la denominada clase media, la cual está restringida en su capacidad de consumo, es la de llegar a dejar el uso de la tarjeta de crédito y financiar el pago de las deudas existentes conforme a las posibilidades de pago del grupo familiar.
El Ombudsman Provincial señaló que “no existen otras alternativas y ello es producto de que nos encontramos ante una crisis económica terminal y cuando se llega al fondo de estas situaciones lo que sugerimos es por un lado no limitarse al pago mínimo de las tarjetas de créditos y paralelamente encontrar una solución en el no uso de la misma, ajustándose en los gastos al máximo para evitar así las intimaciones extrajudiciales y más adelante no tener que enfrentar un juicio por sobre todo cuando la deuda supera más allá de los $15.000 en la generalidad de los casos”.