La actividad cultural es constante en la comunidad de Laguna Blanca

Laguna Blanca, a la que se reconoce como la cuna de la cultura formoseña , se apresta a conmemorar los 104 años de su fundación este viernes 22 de junio y, como ha ocurrido siempre, hay una movilización colectiva para evocar a los pioneros y a quienes contribuyeron a afirmar su evolución que ha sido extremadamente dinámica en los últimos veinte años.
Así lo expresa Aurelio “Neco” Boggiano, quien llegara a esa localidad en 1960 para ejercer la docencia y ese mismo año, el 25 de mayo en la plaza San Martín, se sumó a los demás integrantes de la Peña Chispazos de Tradición que ofrecieron sus bailes junto con otras agrupaciones y cultores del arte nativo.
Evoca que compartía esa peña con Ramón Sambrini, Ramón Mercado, Manuel Acosta, los hermanos Mixdonio, Evelio y Nino Portillo, Carlos Caballero y Miguel Ángel Acosta.
Entre las damas estaban Amelia Falcón, Rubí Insfrán, Olga Martínez, Matilde Acosta, Chichita Celías, Nelly Larrosa, Mary Alberti, Mami Bodón y Tila González, entre otras.
La plaza, la Escuela de Frontera 6 y el patio de la parroquia siempre fueron los lugares elegidos con preferencia para organizar encuentros culturales y, entre ellos, Boggiano evoca al denominado Primer Festival Folclórico del Noreste Formoseño realizado el 14 de junio de 1969.
Una multitud adhirió a este acontecimiento nativista y se contó con la participación de una delegación de Capital presidida por Mario Bejarano y entre los cuales se encontraban los integrantes del por entonces consagrado conjunto vocal Los Sembradores.
Asistieron el intendente Rubén Salaberry Ramos; el doctor Victor Verón Barreto, médico sanitarista y que llegó a ocupar la subsecretaría de Salud Pública de la provincia; Juan José Filippa, corresponsal del diario Clarín y por entonces funcionario de la dirección de Cultura y Adrián Belisario Sánchez, por entonces jefe de Cine y Fotografía de la Dirección de Prensa y Difusión de la provincia.
Boggiano reconoce que Laguna Blanca siempre fue una comunidad dispuesta a colaborar y dedicada con un alto espíritu de sacrificio en aras del bien común.
Pondera la fertilidad de sus tierras y su riqueza agrícola y ganadera así como la calidad de su población rural a la que califica como empeñosa y ejemplar.
No deja de recordar la pujanza comercial de entonces en el contexto de una actividad de la que participaban, entre otras, las desmotadoras oficial de algodón y la de la firma Andersson & Clayton que permitían una movilidad financiera que fue beneficiando progresivamente a los habitantes.
Buenos vecinos
Mencionó a pobladores que se preocuparon por el desarrollo integral de Laguna Blanca entre ellos al doctor Miguel Ireneo Ortiz de dilatada trayectoria; al farmaceutico Franco “Palillo” Romero al que cita como “un hombre servicial”, Ricardo Lacuadri, Alfredo Lemos, Gustavo Sosa Escalada Y Federico Baldús ,entre otros.
Hizo una especial mención de don Elías Fernández Carrizo “quien en su dilatada trayectoria docente fue pilar en el desarrollo cultural y social por cuanto integró todas las entidades e instituciones de bien público”.
Aurelio señala que Laguna Blanca fue centro siempre de grandes eventos deportivos, sociales y culturales y resalta, entre otras cosas, la idea de lanzar el Festival Folclórico del Nordeste Formoseño el primero de los cuales se llevó a cabo el 14 de junio de 1969 en el patio de la parroquia San Francisco de Asís.Ese acontecimiento tuvo una segunda edición y contó con la participación de delegaciones regionales así como también de la propia Capital y otras localidades formoseñas.
“De aquel entonces, Laguna Blanca mucho ha cambiado y para bien”, reconoce para detenerse especialmente en la moderna infraestructura educativa actual que reemplazan a lo que llama “las lejanas escuelas rancho”, no ocultando su regocijo por la creación y puesta en marcha del Instituto Universitario Formoseño.
“Laguna Blanca es hoy una pujante ciudad”, enfatiza para mencionar que entre otras instituciones cuenta con una sucursal del Banco de Formosa; es sede de la delegación zonal del ministerio de Educación en el departamento Pilcomayo; la Unidad Regional 4 de la Policía de la provincia; el servicio de justicia con un juzgado de paz además de oficinas de Registro Civil, Rentas, SENASA, Oficina de Extensión Rural del INTA, Correos y Telégrafos.
También destaca el surgimiento de importantes entidades deportivas y la disponibilidad de los servicios esenciales para la población como la energía eléctrica, agua potable y los de la salud, resaltando que se cuenta con hospitales y sanatorios.
Menciona, asimismo, que la ciudad de Laguna Blanca cuenta con emisoras radiales y de televisión por cable que son de alta utilidad para contar con información actualizada y aprovecharlas para la irradiación constante de la esencia cultural pueblerina